¿Por qué los judíos No Mencionan el Nombre de Dios, en hebreo?

Desde la salida del pueblo de Israel de la tierra de Egipto, estos se encontraron con varios pueblos, con distintas creencias, leyes, costumbres y dialectos, lo cual hizo que los israelitas adoptaran características de estos pueblos, en su mayoría de la tierra de Canaán.

A ciencia cierta se sabe que el pueblo de Israel no poseía una lengua propia, con la cual pudieran establecerse como una nación lingüísticamente independiente; tal es el caso del patriarca Abraham, quien hablaba acadio (Lengua que se hablaba en la mayoría de pueblos en Mesopotamia) que obviamente hablaría su hijo Isaac y su nieto Jacob. Posteriormente los israelitas, siendo esclavos en Egipto olvidaría la lengua de los patriarcas, para adoptar la lengua copta (dialecto egipcio) para desenvolverse en esa región.

El nombre de Dios en Hebreo

Al momento de entrar a tierras cananeas, los israelitas optan por el cananeo (también conocido como paleo-hebreo), como dialecto; por esta razón en la Tanaj Hebrea (Antiguo Testamento) en los primeros 11 capítulos del Génesis, se utilizan distintos nombres para referirse a Dios, todos procedentes de la lengua cananea, entre ellas esta: EL, El Olam, El Shaddai y Elohim, este último en especial, es un término plural muy usado por los pueblos cananeos para referirse a una comunidad de dioses (termino politeísta), aunque los israelitas lo tomaron para referirse al único Dios de Israel (Semántica monoteísta), en ausencia de un nombre en su propio dialecto.

Más adelante, el pueblo de Israel conformaría su propio alfabeto con orígenes cananeos, dando lugar al dialecto hebreo como lengua oficial, lo que llevaría a los israelitas a formar un término con el cual nombrarían a Dios: YHWH, también conocido como el “Nombre Sagrado” o “El Tetragrama Sagrado”, que desde los tiempos del Éxodo hasta la actualidad, tienen prohíbo mencionar, ya que para los israelitas, es un privilegio único y poderoso mencionar ese nombre, privilegio que solamente se le daba al sumo sacerdote, al momento de que este entraba al Lugar Santísimo para ofrecer la ofrenda de expiación por todo el pueblo, una vez al año.

De hecho, se dice que el sumo sacerdote no era el que hablaba por sí solo, sino el Espíritu de Dios era el que descendía sobre él, para qué mencionara el nombre de Dios, para que luego, al salir del Lugar Santísimo, el sumo sacerdote no recordara el momento en que hizo mención del Nombre (Según el Talmud). Otro aspecto en el que se basa el pueblo de Israel para no mencionar el nombre de Dios, es para no violentar el segundo mandamiento, “No tomarás el nombre del Señor tu Dios en vano” (Éxodo 20:7) y la purificación que se necesita para hacerlo, ya que se hace mención del Creador Dios Todopoderoso y de su Gloria;

Entonces uno de los serafines voló hacia mí con un carbón encendido que había tomado del altar con unas tenazas. Con él tocó mis labios y dijo: ¿Ves? Este carbón te ha tocado los labios. Ahora tu culpa ha sido quitada, y tus pecados perdonados.

Isaias 6:6 NTV

Por esta razón los israelitas para poder evitar la blasfemia y la ira de Dios, optaban por usar el nombre HaShem (que significa El Nombre) cuando citaban las escrituras o cuando realizaban sus oraciones.